24 de juliol del 2012

Cap. 17. Qué debe ser compartido y qué no.

En algún momento de nuestra existencia alguien invento un estupido manual de instrucciones en el cual una de las advertencias de uso debía decir algo como: "cuidado con sentir demasiado las cosas, los sentimientos tienen factores nocivos y perjudiciales, pueden provocar efectos como: estar vivo, querer demasiado, doler demasiado, hacer sonreir demasiado y demasiados "demasiado", mantenganse al margen de sentir". 

Pero te vas a la cama y para dormir recreas escenas vividas y te preguntas que habría pasado si en vez de haber elegido A hubieras elegido B, y eso debe significar algo.

Te dejan, te abandonan, te mienten, te utilizan, te castigan, te torturan, te hacen creer algo que no existe y tu te encierras, te escondes, te das cuenta de que jamás sentiras algo así de nuevo, huyes. 
Pero te vas a la cama y vuelves a necesitar de esos pensamientos para poder conciliar el sueño.

¿Donde está la linea que dice que ya es suficiente? 
¿Si a un bebe de menos de un año se le ocurre aprender a decir frigorifico le reñiremos porque es demasiado para él?
¿Si una madre da la vida por su hijo diríamos que es demasiado?
¿Y si alguien quiere saltarse el manual de instrucciones?





¿Y si queremos estar vivos, querer demasiado, que nos duela demasiado, sonreir demadiado y todos los demasiados "demasiado"?
¿Y si alguien quiere sentir de nuevo?
¿Será capaz?

13 de juliol del 2012

Cap. 16 Flexible como... ¿una araña?

Este es un mensaje para esas personas que como yo no saben decir NO o NO QUIERO VERTE NUNCA MÁS.

Porque hay momentos que requieren una de esas dos cosas, una de esas dos tan sencillas frases que casi todo el mundo suele decir al menos bastantes veces en semana, mes, año o incluso día. Y aunque lo recuerdo y utilizo ese pensamiento para poder llegar a pronunciar la primera letra... sus ojos me miran y no soy capaz de decirle que NO QUIERO VERLE NUNCA MÁS.
¿Es esto la flexibilidad que dice la gente que se debe tener en la vida?
La flexibilidad que te hace aceptar cualquier cosa que te haga daño a cambio de no saber decir basta, no saber decir no vuelvas a hacerlo por favor, no saber decir esto no me lo merezco. ¿Flexibilidad?

Pensé en las arañas, en sus telas y en la vida que llevan.
Tienen un trabajo tremendo, todas esas vueltas, ese entramado y... ni si quiera pueden decidir que va a caer en sus redes. Ni si quiera puedes decir NO, no pueden negarse a que algo quede enganchado "por azar", simplemente lo aceptan y hacen lo que tienen que hacer: llevar la situación como tiene que llevarse.
Son flexibles.

Me encantaría que una araña le dijera a una mosca:
- Eh tu, salte ahora mismo de ahí, estoy esperando a una avispa.
Seguramente la mosca se quedaría descolocada, jamás habría escuchado hablar de una araña que dijese NO, una araña que supiera lo que quería y rechazase lo demás.
Seguramente la mosca no se movería, pensaría que es un error, que la araña está equivocada y que de un momento a otro hará lo que debe hacer una araña.

Pero la araña seguiría mirando a la mosca con cara de impaciencia y le diría:
- Márchate, NO QUIERO VERTE NUNCA MÁS.



Siempre alguien puede empezar... siempre hay alguna tela de araña que puede y debe ser distinta...